Conflicto con la Asociación Nuevo Futuro en Sevilla

Desde hace varias semanas el SOV de Sevilla mantiene un conflicto con la Asociación Nuevo Futuro, empresa dedicada a la atención de menores tutelados por la Junta de Andalucía en pisos de acogida. Esta empresa se nutre de subvenciones millonarias que les da el Estado.

Nuevo Futuro decidió no renovar el contrato a nuestra compañera (el tercero en seis meses) cuando ésta pidió que se cumpliera lo acordado en el convenio colectivo y se negó a continuar realizando las horas extraordinarias que de forma sistemática la empresa le obligaba a cubrir. Nuevo Futuro lleva a cabo una política laboral basada en la explotación de sus trabajadoras/es, consistente en la realización de turnos de hasta 72 horas sin descanso, obligación de cubrir bajas de l@s compañer@s, realizar jornadas semanales de hasta 90 horas, cubrir días festivos, no reconocer horas nocturnas trabajadas, cambios repentinos de turnos y funciones, y sobre todo, un chantaje moral continuo utilizando a los menores para obligar a l@s educador@s a tragar con todo lo que la empresa les exija, propio de cualquier ONG.

Nuestra compañera, en seis meses ha acumulado 175 horas extraordinarias, las cuales no le han sido abonadas hasta el momento (cantidad que asciende a 1400 euros).

Nuevo Futuro organiza anualmente Rastrillos benéficos en diferentes ciudades, habiéndose celebrado esta semana pasada el de Sevilla. Tras varias semanas de intentos de negociación con la empresa para que ésta pagara la deuda que tiene desde el 31 de diciembre con la compañera (y en los que no han mostrado ningún ánimo de dar salida a esta situación sin pasar por los tribunales), hemos realizado varias concentraciones en las puertas del recinto donde se celebra este Rastrillo.

En la mañana del jueves 12 de febrero, hemos realizado el último intento de negociación, no accediendo la empresa a realizar ningún tipo de contacto ni diálogo con nosotr@s.

Una empresa que se llena la boca con la solidaridad y con el respeto hacia las personas cómo es posible que despida a una mujer trabajadora, por exigir lo que por ley le corresponde y por reclamar unas condiciones dignas de trabajo.