Ante el pacto PSOE y Unidas Podemos que ha dado lugar a un nuevo gobierno de coalición en España, desde el anarcosindicalismo, la Confederación Nacional del Trabajo lanza un aviso a todos los trabajadores y trabajadoras: No podemos confiar en esta coalición de progreso ni en ningún Gobierno para solucionar nuestros problemas.
Hablan de derogar la reforma laboral de 2012, pero ignoran que en los centros de trabajo es la propia patronal la que impone su visión ignorando la legislación laboral, las sentencias judiciales e inspecciones de trabajo.
Ahora más que nunca,
necesitamos un movimiento sindical independiente, fuerte y amplio.
Hablan de derogar la
reforma laboral de 2012, pero ignoran que en los centros de trabajo
es la propia patronal la que impone su visión ignorando la
legislación laboral, las sentencias judiciales e inspecciones de
trabajo. Es decir, aún en el caso de que un gobierno de progreso
implante una normativa beneficiosa para las personas trabajadoras, no
existe capacidad ninguna por parte del gobierno, ni siquiera del
aparato estatal, para asegurarse de su cumplimiento.
Ante una patronal
incumplidora, que apuesta por la judicialización permanente de los
conflictos laborales y por la represión de las expresiones
sindicales que no se someten a sus dictados, la única garantía de
respeto a una hipotética legislación laboral benevolente es la
implantación de la organización sindical en todos y cada uno de los
centros de trabajo.
La única garantía de respeto a una hipotética legislación laboral benevolente es la implantación de la organización sindical en todos y cada uno de los centros de trabajo.
El pacto firmado y dado
a conocer a finales de Diciembre de 2019, camufla bajo el discurso de
la derogación de la Reforma laboral del PP de 2012, un rediseño de
la Negociación Colectiva encaminada a su centralización en las dos
burocracias sindicales que monopolizan la firma de convenios
colectivos sectoriales. No hay una sola mención a las medidas que
realmente ayudarían a dar estabilidad real a los puestos de trabajo,
como por ejemplo la nefasta desaparición de los salarios de
tramitación en los despidos improcedentes que introdujo aquella
reforma, en conjunción con el abaratamiento del despido. Ni siquiera
hay medidas para atajar la temporalidad fraudulenta.
No hay una sola mención a las medidas que realmente ayudarían a dar estabilidad real a los puestos de trabajo.
Es por todo esto que
desde la CNT creemos que estamos en un momento en el que es necesario
hacer un llamamiento de urgencia a todos los trabajadores y
trabajadoras, a la organización sindical alternativa, real y
práctica al sindicalismo de representación unitaria, incapaz de
hacer frente a las nuevas formas de explotación de la nueva
economía, por ser un desfasado e ineficiente residuo de la coyuntura
política y económica de los años 70 del siglo pasado. Porque cada
nueva generación entra en un mercado laboral más precario que la
anterior. Porque estamos en un momento de transición hacia un cambio
tecnológico que amenaza con destruir millones de puestos de trabajo
y crear otros aún más precarios.
Vamos a continuar dando
prioridad a la organización Directa, empresa por empresa, y a la
Negociación Colectiva. Es la única manera de acabar con la brecha
salarial, con la congelación de sueldos, con la temporalidad
abusiva, con los accidentes laborales, y con los recortes y despidos
masivos: fiscalizando qué clase de contratos se hacen, a quién, y
cuánto se les paga. Conociendo cuánto dinero entra, cuánto sale y
a qué se dedica. Para evitar legislaciones tramposas. Y por qué sin
esta forma de fiscalización, no hay legislaciones laborales
buenistas que valgan.
Gobierne quien gobierne
nuestra prioridad no puede cambiar, la defensa de nuestros derechos
es nuestra responsabilidad.
La entrada CNT ante el gobierno de coalición: nuestra responsabilidad no puede cambiar se publicó primero en Confederación Nacional del Trabajo.