Esta mañana hemos tenido conocimiento de las detenciones, perpetradas ayer por la policía, de compañeros antifascistas en Sevilla y provincia. Unas 7 detenciones que se producen tras los supuestos altercados que se vivieron, hace casi un mes, en la capital sevillana el 29 de octubre, en el transcurso de una manifestación del grupo FASCISTA «Resepuesta Estudiantil».
Esta tarde hemos recibido con satisfacción la puesta en libertad, con cargos, de estos compañeros. Se les imputan delitos de alteración del orden público, cuando precisamente en esa manifestación fascista hubo bengalas, conatos de incendio en papeleras y contenedores, insultos, objetos lanzados y una contundente protección de los antidisturbios que, por delante, iban limpiando la calle de contramanifestantes.
Desde el Gurpo de Juristas 17 de Marzo se han calificado estas detenciones de «políticas», que los detenidos carecen de antecedentes y estaban perfectamente localizable, que bastaba con una citación judicial y ha sido desproporcionado ir a sus casas y a sus trabajos, a detenerlos?”, y han acusado a la subdelegada del Gobierno en Sevilla, Felisa Panadero, de ordenar “detenciones políticas” para así “tapar sus errores”.
Todo esto se enmarca dentro del embate que lleva el poder contra elementos, sindicatos, grupos/asociaciones, ateneos, movimientos sociales, todo el espectro combativos a nivel nacional. Mismamente la asociación Mujeres Libres, afín a este Sindicato, está siendo objeto de seguimiento policial. El mes pasado, ya bien de noche, se una persona anónima vio entrar a dos guardias civiles en el local nuestras compañeras comparten con los Huertos Autogestionados y que, por cierto, ha padecido el boicoteo de sus cerraduras en los últimos 8 meses.
El Estado FASCISTA que padecemos, no nos coge de sorpresa. Ha sido constante el seguimiento a ese espectro inconformista, ideológicamente contrario y combativo al poder fascista imperante. Con el cambio sustancial del Código Penal, promovido por el ministro del Opus, Gallardón se va ha dar un vuelco para la represión económica sobre este espectro social. Ya no se puede ejercer el derecho a la protesta, el derecho de oposición, el derecho a la libertad de expresión, el derechoa a la libertad de acción no violenta. El simple hecho de ser contrario a las ideas del poder nos va a traer persecuciones, identificaciones y, sobre todo, multas importantes tendentes a desartucular la oposicion social. Pero no nos aflijamos y menos nos escandalicemos. Las listas negras policiales existen, la tortura existe, la arbitrariedad existe, es que nunca han dejado de existir. Esto es lo que nos trae, no sólo un Estado FASCISTA, si no cualquier sistema AUTORITARIO. De aquella represión, a la de ahora, no hay muchas diferencias. De lo que nos queda por ver y vivir, el tiempo no dirá: represión pura y dura… Estado policial-fascista.
¡Contra el Estado y su violencia… ahora y siempre acción directa!