DOSIER Derechos Laborales | Comarcal Sur-Madrid | Ilustración de Rosa Fraile | Extraído del cnt nº 427.
Tomando como punto de partida el papel que ha de tomar la sección sindical en los procesos de negociación colectiva y su consolidación en cada empresa o centro de trabajo donde estén constituidas, las perspectivas de una acción sindical con capacidad de éxito se amplifican por las múltiples posibilidades que en sí entraña nuestra propuesta sindical.
Los diferentes cambios que se han venido produciendo en el marco de la legislación laboral y, concretamente, los que afectan a la negociación colectiva han ido apuntalando progresivamente un modelo por el cual pierde poder la negociación colectiva sectorial en beneficio de la negociación en un ámbito inferior. Tanto es así que, a día de hoy, un convenio de empresa puede reducir las condiciones del convenio sectorial de ámbito provincial, autonómico o estatal, rompiendo la lógica anterior a estas últimas reformas, por la cual los convenios de rango inferior solo podían complementar las disposiciones y bajo ningún concepto, empeorarlas. Bajo este marco, la capacidad de representatividad de las centrales sindicales de concertación, que está en función del porcentaje de delegados/as obtenidos en comités de empresa (vía elecciones sindicales) se desmiembra. Así, su poder se ve reducido en la representación única, y exclusiva, que el sistema diseñado en los Pactos de la Moncloa les otorgó como interlocutores del Pacto Social junto a las patronales y el Gobierno.
Será nuestra actividad sindical en conjunción con nuestra implantación en la empresa la que nos dotará de mayor garantías jurídicas para nuestra participación en los procesos de negociación.
Este escenario constituye una nueva brecha, y ventana de oportunidad, en las posibilidades de las secciones sindicales de CNT en el ámbito de la empresa y centro de trabajo. Una oportunidad para que la representación directa de los/as trabajadores/as alcance mayor capacidad y fuerza en la negociación colectiva extraestatutaria, en función de nuestra implantación en las empresas. Es decir, una representación basada, y adquirida legítimamente, en el porcentaje de afiliación en relación al número total de trabajadores/as.
Fuerza sindical desde la base
Las secciones sindicales son el órgano de representación directa de la CNT en las empresas y todo su poder reside, y se cimenta, en el seno de los ámbitos productivos. Se obtiene la afiliación en el mismo espacio y lugar en el que se producen las relaciones laborales, sin estar supeditada a otros estamentos superiores, bien sean de las estructuras jerarquizadas de los modelos sindicales de concertación o en el plano legislativo por el cual, se articula el modelo y la norma, como anteriormente hemos señalado.
La CNT y sus secciones sindicales adquieren así una dimensión centrada precisamente en la organización directa, sin intermediarios/as, de los/as trabajadores/as en sus empresas. Esto nos brinda la oportunidad excepcional de demostrar nuestra fuerza directamente frente a la empresa.
Oportunidades y correlación de fuerzas en los conflictos sindicales.
La capacidad de negociación no solo reside en el marco de la norma que nos otorga derechos en la representación colectiva de los/as trabajadores/as, sino en la complementación e implementación de estrategias jurídicas y sindicales propias, y adaptadas al terreno concreto en el que abordamos un conflicto sindical. Esto lo determinarán un amplio abanico de factores que se producen a diferentes escalas, y sobre todo, el punto de partida de la sección sindical en la empresa y su relación de fuerza construida en la afiliación, la implantación y consolidación de la sección sindical. Así como la actividad sindical proactiva y su intervención constante de mejora y reconocimiento de derechos frente a la política laboral de la empresa.
Nuestra actividad sindical en conjunción con nuestra implantación en la empresa será la que nos dotará de mayor garantías jurídicas para nuestra participación en los procesos de negociación
Intervenir en los planes de prevención y salud laboral, los planes de igualdad, en la política de contratación (contrataciones irregulares o en fraude de ley) prevenir y actuar ante el acoso, la conciliación familiar y los derechos de maternidad/paternidad, el cumplimiento de las tablas salariales, y su correlación directa con las categorías profesionales, los fraudes en las jornadas máximas laborales y la horas extras no remuneradas, y actualmente todo lo relacionado con el teletrabajo y el trabajo a distancia, al igual que en los ERTE’s y los ERE´s para evitar por todos los medios la destrucción de empleo. Y en la defensa firme del sindicato cuando en la empresa se produzcan represalias de cualquier tipo contra los/as trabajadores/as, y máximo cuando estas se traducen en sanciones, acoso, suspensiones de empleo y sueldo y, como extremos, el despido.
Será nuestra actividad sindical en conjunción con nuestra implantación en la empresa la que nos dotará de mayor garantías jurídicas para nuestra participación en los procesos de negociación. Del mismo modo, y de forma pareja, todas las herramientas de acción sindical que podamos desplegar como forma de presión directa frente a la empresa, pasando estas por la comunicación y denuncia pública, la presión, el piquete y la huelga, entre otras medidas.
Nuestra relación con el entorno social y territorial es clave e indispensable para extender el conflicto sindical de la empresa hacia la calle. En relación con su impacto socio-económico, con el empleo del territorio en cuestión y los apoyos y la solidaridad de los movimientos asociativos y colectivos cuando se declare el conflicto, estas relaciones son imprescindibles para la amplificación de las demandas y reivindicaciones, y su trascendencia y reflejo ante otras empresas del sector.
La experiencia y las victorias que los sindicatos de la CNT venimos materializando en diferentes sectores y por diferentes causas nos están demostrando que nuestro modelo sindical, además de eficaz, es indispensable.
Liderazgo en el conflicto sindical
La presencia de las secciones sindicales de la CNT en los procesos de negociación son clave, principalmente, por tres razones:
- La primera; porque garantiza que las decisiones y demandas del conjunto de la afiliación en la empresa serán tomadas y decididas en procesos de participación directa (asamblea de sección sindical o de trabajadores/as) y trasladadas y defendidas por los/as delegados/as nombrados/as para tal fin.
- En segundo lugar; porque son un elemento extremadamente eficaz para controlar, vigilar y presionar a los sindicatos de concertación, que también estén representados, para que respondan a los/as intereses de los/as trabajadores/as y no culminen este proceso a la baja y con un resultado negativo para la plantilla.
- Y en tercer lugar; frente a la empresa y sus estrategias de pacto para poder llevar a buen puerto sus planes y, por tanto, sus intereses.
No existe una estrategia única para las secciones sindicales. Esto dependerá, de nuevo, de todo este conjunto de factores pero lo que es cierto, y sin lugar a dudas, es que la ambición colectiva para intervenir con un papel relevante en los procesos de negociación y las perspectivas con las que trabajemos condicionarán nuestro lugar de intervención, sin ser relegados/as a un tercer plano, o como fuerza sindical «ajena» a la mesa de negociación. Si no como actor principal en la toma de iniciativa, de movilización de la plantilla, de contrapeso frente al resto de representantes y en el desarrollo las acciones jurídicas, tanto defensivas como ofensivas, durante el conflicto.
El acceso a los procesos de negociación no solo repercutirán directamente sobre el conflicto, o elemento que esté en disputa, sino que también nos abrirá otras oportunidades que influirán directamente en la consolidación de derechos y garantías de nuestra sección sindical, como pueden ser el acceso a la información en cualquier área de la empresa: económica y productiva, la contratación, los planes de igualdad o de salud laboral y otra serie de datos que nos serán muy útiles no solo frente al conflicto en concreto, también en las perspectivas y planes a corto y medio plazo de la actividad sindical en la empresa.
La experiencia y las victorias que los sindicatos de la CNT venimos materializando en diferentes sectores y por diferentes causas nos están demostrando que nuestro modelo sindical, además de eficaz, es indispensable. Rompe con las dinámicas de supeditación y pacto, y propone un cambio en la cultura sindical de la representatividad por un modelo independiente, autónomo, de participación y acción colectiva en la defensa de los derechos laborales y sociales.
La entrada La negociación colectiva y los pactos extraestatutarios se publicó primero en Confederación Nacional del Trabajo.